Llega el calor y con él las ventanas abiertas.
En ésta época los veterinarios empiezan a recibir las primeras llamadas de urgencia por gatos que han caído desde ventanas o balcones.
Si nuestro gato cae, no sólo puede hacerse mucho daño a él y a personas que puedan pasar por la calle, sinó que pueden salir corriendo en cualquier dirección y perderse. Puede ser que además esté herido y no podamos localizarlo (si lo recoge alguien y lo lleva al veterinario nos podrán localizar fácilmente si nuestro gato tiene microchip).

Las heridas más comunes son las fracturas de extremidades o del paladar, pero lo más grave son daños en pulmones y hemorragias internas. Aunque nos parezca que no le ha pasado nada y que está bien, es muy importante llevarlo rápidamente a su veterinario para que le haga una revisión médica y se asegure de que nuestro gato no tiene ningún problema que no nos sea evidente a simple vista.

Debemos tener cuidado con no dejar ventanas abiertas sin protección (en otras entradas hemos hablado de mayas y medida de seguridad que puedes comprar a través de nuestro banner de Zooplus), y también vigilar con las ventanas abatibles. Aunque pensemos que no caben ellos intentan pasar y suelen quedarse encajados en ellas, pudiendo tener problemas vasculares y tromboembolismos que pueden provocarles la muerte.